El tobogán de verano es real. En promedio, los estudiantes pierden de 2 a 3 meses de progreso en el aprendizaje que lograron durante el año escolar cuando no dedican tiempo a practicar durante el verano. ¡Pero trabajar esta práctica en la rutina de verano es más fácil de lo que muchos padres piensan!
En el video a continuación, brindamos algunos consejos simples pero poderosos para trabajar un poco más en lo académico en los días de sus hijos para evitar ese temido "deslizamiento de verano".
Conclusiones clave
Aquí hay un resumen de nuestros consejos profesionales para prevenir la pérdida de habilidades durante el verano:
Crear estructura
Los niños anhelan la rutina. Necesitan previsibilidad. Pero no tienen la metacognición para saber esto sobre sí mismos, e incluso puede parecer que se resisten a las nuevas rutinas. ¡No dejes que te engañen! Todos los niños se benefician de la estructura. Reservar una cantidad de tiempo designada cada día durante los meses de verano les dará a los niños la práctica que necesitan para mantener sus habilidades afiladas, y es mucho menos probable que luchen contra eso, porque saben exactamente cuándo sucede cada día y por cuánto tiempo. durará! Si su hijo es del tipo al que le gusta aclarar las cosas temprano, pídale que haga sus 20 minutos de matemáticas a primera hora después del desayuno, antes de su día en la playa. O haz que se relajen cada noche con 20 minutos de lectura. Mejor aún, ¡incorpore ambos! Después de unos días, se convertirá en parte de su rutina de verano.
Dividir tareas
Si su hijo tiene tareas para el verano, ayúdelo a hacerlas dividiéndolas en partes pequeñas. Si tiene la forma de un paquete, esto probablemente será fácil: ¡solo haga que los estudiantes hagan 1-2 páginas al día hasta que esté listo! Para tareas más cohesivas, como un proyecto, ensayo o informe de un libro, probablemente necesitarán ayuda para identificar esas piezas más pequeñas. Para hacer esto, escriba una lista de todos los elementos de acción que sus estudiantes deben tomar para completar la tarea. ¿Necesitan leer un libro? Desglosarlo por capítulos. ¿Necesitan realizar una investigación para escribir un artículo? Pídales que hagan preguntas y respondan una pregunta cada día hasta que estén listos para redactar.
Haz que el aprendizaje sea divertido
¡La práctica de habilidades no necesita consistir en "ejercicios" y hojas de trabajo! Hay tantos juegos que son lo suficientemente atractivos como para "engañar" a los niños para que aprendan. Uno fácil de modificar es Go Fish, que se puede cambiar para que, en lugar de encontrar cartas similares, los jugadores trabajen en hechos de "Make 10". ¡O simplemente saque el juego de mesa favorito de su hijo y sustituya las tarjetas originales por operaciones matemáticas!
A los niños también les encanta cuando sus padres se involucran en su aprendizaje. Hágales preguntas sobre su trabajo (no para probarlos, sino para mostrar su curiosidad genuina). Si tiene tiempo, lea el mismo libro que están leyendo y hable sobre él mientras lo lee. Organice sus propios debates en el mini club de lectura.
Celebra el trabajo duro
Finalmente, ¡no subestimes el poder del refuerzo positivo! Mostrar orgullo y entusiasmo por cada pequeño éxito contribuirá en gran medida a aumentar su motivación para que mantengan los buenos hábitos que han establecido durante todo el verano.
¡Asegúrese de estar atento a algunos de nuestros recursos favoritos que publicaremos pronto!